Almidonar las camisas es una forma de que queden bien planchadas y frescas. Además así minimizamos las arrugas y le damos apariencia más pulcra. El almidón puede ser un gran amigo para ayudar a proteger las fibras de la prenda y así prolongar su uso por más años. La clave para hacer un buen almidonado es saber cómo debes preparar la prenda, crear la mezcla de almidón correctamente y aplicar la cantidad exacta. Te contamos ahora cómo almidonar las camisas.
- Lo primero que tienes que hacer es preparar la camisa ¿cómo? Pues deberás lavar y secar adecuadamente la prenda, porque la suciedad de la misma puede inhibir las propiedades del almidón.
- Una vez prepares la prenda deberás realizar la mezcla del almidón. Normalmente si compras almidón en polvo, en el envase vendrá la proporción de agua que deberás añadir y el producto. Echa la mezcla en rociador de spray.
- Una vez tengas las mezclas deberás planchar con almidón ¿Cómo? Pues coloca la camisa sobre la tabla de planchar por la parte de la espalda. Rocía de manera uniforme el almidón a toda la espalda. Espera dos segundos para que la fibra absorba el producto. Pasa la plancha a la temperatura indicada para el tejido de la camisa. Repite el proceso de rociado y planchado por el frente de la camisa, y por último, en las mangas y el cuello.
- Después toca el mantenimiento. Tendrás que dejar airear la prenda unos minutos y después deberás colgarla en la percha y guardarla. Ten cuidado al colgarla porque el almidón refuerza la forma en la que se quede la prenda.
¡Listo! Así tendrás tu camisa almidonada y con una presencia a planchada y fresca que dará envidia. Hay mucha gente a la que no le gusta almidonar las camisas, pero es una manera muy fácil de tener tus camisas sin arrugas.